Europa no levanta cabeza pese a generar el 25% del PIB mundial y contar con un mercado potencial de 500 millones de consumidores. Su crecimiento ha sido lento desde la crisis financiera de 2008; el desempleo se mantiene persistentemente alto en una serie de países –con España a la cabeza- y el crecimiento de la productividad sigue siendo débil, especialmente en los servicios. Ante esta gravísima situación que asemeja a un colapso económico, el think tank Friends of Europe y la consultora McKinsey han decidido tejer una alianza estratégica para que Europa recupere su dinamismo. Y lo hacen después del premonitorio discurso de Obama en Hannover (Alemania) donde advirtió que “el débil crecimiento económico en Europa, especialmente en su parte sur, ha dejado a millones de personas en paro, incluyendo una generación de jóvenes parados que puede ver el futuro con cada vez menos esperanza. Todas estas continuas dificultades han llevado a algunos a preguntarse si la integración europea permanecerá mucho tiempo”.
Pero de momento esta unión no se traduce en una Hoja de Ruta que devuelva a la Unión Europea su esplendor. Se limitan a la convocatoria de un concurso de ensayos a nivel mundial, patrocinado por la Comisión Europea, con el que ambas organizaciones pretenden encontrar soluciones a lo que califican como uno de los mayores enigmas políticos y económicos de Europa: “el establecimiento de programas de reforma a favor del crecimiento que atraigan a los electores europeos y tomadores de decisiones”.
El multimillonario Étienne Davignon
trata de ganar protagonismo en la UE
Friends of Europe, el think tank que preside el multimillonario Étienne Davignon, trata de ganar protagonismo en la UE con el anuncio de esta puntual alianza con la consultora McKinsey Global Institute. Para ello no dudó en anunciar la convocatoria del ensayo que la propia McKinsey lleva publicitando desde marzo pasado y que tuvo su precedente años anteriores. La consultora ya diagnosticaba en 2015 que “la región podría alcanzar un crecimiento económico del 2 al 3% al año mediante la realización de reformas que incentivaran la inversión y la creación de empleo. McKinsey insiste en sus propuestas de reformas que asegura llevarían a Europa a crear más de 20 millones de nuevos puestos de trabajo.
Europa es valorada como líder mundial en una serie de aspectos de la vida social y económica. Sin embargo, a pesar de estos sólidos fundamentos, “es menos dinámica y resistente de lo que podría ser”, concluye el think tank impulsado por Étienne Davignon. Achaca este impasse a que mientras algunos países han tenido éxito en la reforma del mercado de trabajo, en revisar los sistemas de educación o en lograr que el aparato de gobierno sea más eficiente, su ejemplo no es seguido por otros estados miembros de la UE.
¿Qué hace falta para que Europa recupere su dinamismo? ¿Qué medidas políticas podrían ser más eficaces para el crecimiento? ¿Cómo podrían los países europeos aprender y emular las mejores prácticas los unos de los otros? Estas son algunas de las cuestiones que se plantean a quienes decidan presentarse al concurso de ensayos, que bajo el patrocinio de la Comisión Europea, recibirán 60.000 o 25.000 euros, según a la categoría que concurran.
